Hay días

imágen de Papersome
Mi optimismo puede resultar a
veces conmovedor. No quisiera. Hay días, dice la canción, cierto que hay días
que cualquiera de nosotros debe salir del ovillo de la comodidad porque algún
cristal de tu ventana se hizo trizas y pone tu casa patas arriba.
Quisiera pensar que cuando eso
sucede el corazón, además de golpearse, se ensancha y así nos va ayudando
cuando hay que reparar más ventanas. Esta mañana el mío se ensanchó un poquito
más. Ya descansa la mamá de una de mis buenas amigas y no he podido más que
ahogarme por no poder salir corriendo a abrazarla y reconfortarla. El mar media
y mucho entre nosotras. El Azul y yo hemos vuelto a dialogar. Hoy estaba bello
a rabiar y se empeñaba en golpear las rocas como si quisiera espabilar mi
furia.
Ojalá mis palabras sean consuelo
y acaricien tu alma.

Quizás también te interese leer

Sin comentarios

Deja tu comentario