Debí llamarte mi niña Sol, pero todas las aes querían estar en tu nombre. Acepté que fueras la mujer que viene del mar: Adriana. Qué preciosa eres: tienes la sonrisa fácil,…
tic tac
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El verano está terco en el norte, como si el calor no acabara de encontrar su sitio; hace tiempo que para mí no es ningún secreto, es mi refugio térmico. Vienen…
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No todo fueron luces. Claro que no, no lo fueron. He pasado meses deambulando por todas mis calles interiores. De día, de noche. Repasaba mi lección: cómo aprender a decirte adiós.…
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Todo este tiempo sin sentarme a escribir en mi jardín de tulipanes. Sabrás que estoy leyendo, haciendo mías todas las historias que me liberan, me cobijan. Sabrás también que estoy viviendo,…
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Una persona buena, por más que sea miserable, inculta, analfabeta, malhablada, vaya malvestida y descalza, sea casi anónima, alguien a quien nadie fotografió, escuchó, ni agradeció nada, puede merecer la inmortalidad…
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Greta se muestra cada vez más curiosa. Me mira descarada, fijamente. Yo no me atrevo a sostenerle la mirada, sería como lanzarme al agua fría, profunda, en medio del océano. Mi…
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Crecí detrás de la barra de un bar. Equivale a ir a la escuela dos veces. La máquina de café silbaba con fuerza por la mañana, como una vieja locomotora que…
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Un par de lágrimas al día serán suficientes. Prescripción médica. Siempre he sabido que llorar es bueno: hidrata los ojos, limpia el alma. Y que cuide de mi luz nocturna, del…